El Gobierno de Costa Rica planteó, en conjunto con las autoridades panameñas, que autobuses recojan a los migrantes en un albergue de Panamá y los trasladen hasta otro en el lado tico para controlar el imparable flujo de transeúntes que se acumula en la frontera común, lo que ha generado tensiones con la población.
“Hemos solicitado a las autoridades panameñas su anuencia para que buses costarricenses puedan ingresar y descarguen a los pasajeros en los Centros de Atención Temporales para Migrantes (Catem) no en Paso Canoas”, dijo a EFE el ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Mario Zamora, tras una reunión con dirigentes locales cerca de la frontera con Panamá.
Detalló que “las autoridades panameñas están considerando el tema” y que “han planteado la posibilidad de que sean los buses panameños que recogen a las personas y los trasladen a la frontera común”.
De esta manera, los buses recogerían a los migrantes en el albergue de Los Planes de Gualaca, en Panamá cerca de la frontera común, y los trasladarían hasta otro en Costa Rica, evitando que se acumulen en Paso Canoas, comunidad limítrofe entre ambos países.
Según Zamora este planteamiento fue hecho durante la reunión de la semana pasada entre ambos Gobiernos, en la que acordaron unirse “en una sola voz” frente a la comunidad internacional para afrontar la crisis migratoria.
Visita al Darién
El próximo 22 y 23 de septiembre las autoridades costarricenses y panameñas viajarán a la selva del Darién, fronteriza entre Panamá y Colombia que es usada por los migrantes en su viaje hacia Estados Unidos.
El líder de la cartera de Seguridad destacó que allí van a “anunciar ciertos trabajos conjuntos (..) en materia de tratamiento del flujo migratorio” y espera que se concrete que “los buses panameños tengan un paso franco en la frontera”.
Zamora sostuvo una reunión en Neily con dirigentes locales de Paso Canoas, quienes ya se han quejado de la presencia de los migrantes que se acumulan allí por falta de dinero para seguir el viaje y han protestado con el cierre intermitente del área, lo que ha generado tensión.
“Se han comprometido que en una reunión en los próximos días en Panamá van a terminar de afinar los detalles para establecer un tránsito controlado de migrantes”, declaró a EFE César Vega, del movimiento Defendamos La Frontera.
Explicó que “bien sea que los autobuses de estos migrantes desde Darién hasta Gualaca pasen directo hasta el Catem o desde Paso Canoas aborden buses costarricenses para salir directo hacia la frontera con Nicaragua”.
En la reunión estuvieron presentes el ministro Zamora, otras autoridades gubernamentales y organismos como la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), según pudo constatar EFE.
Al menos 350,841 migrantes han cruzado el Darién en lo que va de año, siendo la mayoría son venezolanos. Estas cifras históricas superan al total de viajeros que cruzaron esa jungla en 2022 (248 mil).
El actual flujo migratorio ha sobrepasado las capacidades de las estaciones migratorias y los organismos internacionales que se encuentran en Darién.
Panamá anunció un paquete de medidas para enfrentar la crisis migratoria en el Darién como aumentar las deportaciones y mover los puntos de control a los que llegan los viajeros.