El Ayuntamiento de Tecomán trabaja en la preparación de un programa dirigido a hombres generadores de violencia. Cecilia Elizabeth Valencia Padilla, directora de Educación y Prevención del Delito, informó que esa iniciativa forma parte de los esfuerzos coordinados desde la Dirección Municipal de Seguridad Pública y tiene como objetivo intervenir en el comportamiento de quienes ejercen violencia, y no únicamente en las consecuencias que genera.
Explicó que, hasta ahora, la atención se ha centrado principalmente en las víctimas, pero es momento de incluir al otro actor de este problema: “Vamos a trabajar con este sector que es el que produce la violencia, y vamos a reeducar la parte masculina. Vamos a abrir grupos para trabajar con la persona que produce la violencia”.
La funcionaria destacó que se trata de una intervención enfocada en transformar percepciones y conductas aprendidas desde edades tempranas, particularmente aquellas relacionadas con el machismo y el dominio en las relaciones familiares. “Trabajamos con la víctima, pero al que replica la violencia se le deja de lado. Entonces también es importante trabajar con ellos y reeducarlos con valores, enseñándoles que la violencia y este patriarcado que quizás hemos aprendido desde la infancia no son adecuados para llevar una familia o para el trato a una mujer o a los hijos”, subrayó.
Aunque el programa todavía se encuentra en etapa de planeación, se prevé que funcione mediante talleres vivenciales a los que se canalizará a hombres identificados por la propia dependencia. La intención es ofrecer un acompañamiento que permita modificar actitudes violentas y contribuir a prevenir nuevas agresiones. “Estamos evaluando la manera de implementarlo para comenzar a aterrizarlo y trabajar”, agregó.
Mientras ese proyecto se concreta, Valencia Padilla indicó que la Dirección de Prevención del Delito sigue operando con un protocolo de atención a casos de violencia familiar, el cual incluye visitas domiciliarias. El proceso inicia con una primera visita en la que se proporciona información básica, números de emergencia y se ofrecen servicios gratuitos como atención psicológica, trabajo social y asistencia del juez cívico.
Posteriormente, se realiza una segunda visita para dar seguimiento y verificar que el hecho violento no se haya repetido. Finalmente, una tercera visita sirve para reafirmar la atención brindada y, en caso necesario, ofrecer nuevas alternativas.
Respecto a la respuesta de las mujeres víctimas de violencia, la directora aseguró que se ha incrementado la disposición para denunciar y colaborar con las autoridades. “Muchas veces, por desconocimiento, la mujer no sabe que debe ratificar la denuncia. Nosotros vamos, verificamos su situación y le proporcionamos la información necesaria para que sepa cómo actuar. Hasta ahora, la apertura ha sido buena”, mencionó.
Valencia Padilla también señaló que el consumo de alcohol es uno de los factores más comunes en los casos de violencia familiar, ya que desestabiliza el entorno familiar y puede derivar en episodios de agresión. Aunque en menor medida, el consumo de otras sustancias también contribuye al problema.
En situaciones donde hay niños involucrados, se activa la intervención del área de psicología para brindar atención tanto individual como familiar. En algunos casos, se canaliza a través del Instituto de la Mujer Tecomense para ampliar el apoyo a todos los integrantes del núcleo afectado.
