Mié. Dic 10th, 2025

COLUMNA: Viernes de branding, marketing, publicidad y relaciones públicas con perspectiva de género*

Por Redacción Sep19,2025 #Opinión

Promueve tu imagen como marca

Por Jorge Ricardo Vásquez Sánchez

El miércoles 17 de septiembre de 2025, fui invitado en dictar la conferencia “Promueve tu imagen como marca” en el marco del 67° Aniversario de la Facultad de Derecho de la Universidad de Colima, donde pude compartir con la comunidad universitaria de la Facultad sobre un tema que me apasiona y que veo muy pertinente que desde la etapa de estudiantes se comience a poner en práctica, por ello, en la edición de este viernes, socializo las reflexiones que hice ese día sobre el proceso para construir, desarrollar e implementar el personal branding.

Construir una marca personal no es un lujo reservado para profesionales que ya egresaron y tienen amplia trayectoria: es una inversión estratégica que conviene comenzar desde la etapa de formación. Si esperas hasta egresar para “hacerte visible”, habrás perdido años valiosos para experimentar, equivocarte y consolidar una reputación positiva que se transforme en prestigio. Promover tu imagen como marca personal mientras estudias te permite definir con calma tu propuesta de valor, generar redes relevantes y llegar al mercado con credibilidad y trayectoria demostrable.

El punto de partida es el autoconocimiento – primera fase –, antes de definir qué quieres comunicar, pregúntate: ¿qué me apasiona de mi disciplina? ¿qué habilidades me diferencian? ¿qué valores quiero que rijan mi trabajo? Responder con honestidad facilita diseñar una narrativa auténtica que conecte con audiencias reales: docentes, empresas, colegas y comunidades afines. Esa narrativa no debe ser un discurso vacío; debe sustentarse en experiencias concretas —proyectos académicos, voluntariados, prácticas profesionales, trabajos colaborativos— que respalden lo que dices.

La propuesta de valor es la segunda fase clave; ser marca personal significa saber qué ofreces y a quién se lo ofreces. Evita definiciones genéricas: “estudiante proactivo” o “apasionado por el área” dicen poco. Mejor fórmula algo específico: “futuro abogado especializado en derecho intelectual” o “futura abogada con enfoque al derecho corporativo”. Esta claridad te ayuda a elegir en qué actividades invertir tiempo y a diseñar un discurso coherente.

La identidad —visual y verbal— no debe subestimarse, siendo la tercera fase del proceso. Una foto profesional, una biografía corta y clara, y un diseño consistente en tus perfiles de redes sociales transmiten profesionalismo. No necesitas un logo caro; sí una línea estética coherente (tipografías, paleta de colores y tono de comunicación). Cuida además el uso del lenguaje: opta por formulaciones incluyentes y no sexistas en tu presentación y en los contenidos que compartes. Esto no es solo correcto desde lo ético; amplía tu capacidad de conexión con audiencias diversas.

Comunicar sin estrategia es ruido, y en esta cuarta fase del proceso, decide qué canales son relevantes para tu área (LinkedIn, Instagram, Facebook, TikTok, un blog profesional) y diseña un plan de contenido mínimo y sostenible: comparte avances de proyectos, aprendizajes en clase, reflexiones sobre prácticas profesionales y recursos útiles para tu comunidad. No publiques por publicar: procura que cada aportación muestre tu experiencia o tu proceso. El contenido de valor – quinta fase – te posiciona como persona que aporta y no únicamente que busca atención.

El networking como fase sexta,  es la palanca que acelera la construcción de marca personal, por ello,  participa en congresos estudiantiles, ferias de empleo, proyectos interinstitucionales y espacios de voluntariado. Recuerda que el networking no es acumulación de contactos; es cultivarlos: agradece, reporta avances y ofrece colaboración cuando esté en tus manos.

Desde el servicio social constitucional, la práctica profesional — actividades que están dentro de tu curricula —, colaboraciones que realices con ONGs,  o proyectos freelance pequeños que hagas,  aporta evidencia tangible de tu capacidad, es importante que documentes ese trabajo: casos de estudio breves, lecciones aprendidas y resultados medibles. Estos contenidos alimentan tu curriculum y son material útil para entrevistas futuras y ganar reputación positiva en tu marca personal. Además, asumir responsabilidades reales te enseña a comunicar, negociar y a gestionar expectativas, competencias clave de cualquier marca personal exitosa.

En el mundo digital, tu marca personal de potencializa, es clave que desde este momento revises qué aparece si buscan tu nombre y elimina o ajusta contenidos que no representan la imagen que deseas proyectar. Alinea nombres de usuario cuando sea posible y utiliza una foto profesional coherente en cada una de las redes sociales que utilices.

Por último, evalúa y ajusta, en esta fase séptima, establece indicadores simples: número de oportunidades de práctica obtenidas, solicitudes de colaboración, interacción en publicaciones clave o invitaciones a participar en eventos. Estas métricas no son fines en sí mismas, sino señales para ajustar el rumbo: si cierto tipo de publicación genera diálogo, haz más de eso; si algo no funciona, prueba otro formato. La construcción de marca es proceso continuo: prueba, mide y mejora.

Finalmente, piensa en la marca personal como un proyecto a mediano y largo plazo, lo que hoy construyes en la universidad —tus valores, tus conocimientos, tus relaciones— será la base sobre la que edifiques oportunidades profesionales. Promover tu imagen desde la etapa de formación te permite llegar al mercado con credenciales reales, una red de apoyo y una voz construida con experiencia.

Promover tu imagen como marca personal desde ahora es apostar por una trayectoria con propósito, empieza por conocerte, define tu valor, comunica con coherencia e inclusión, practica profesionalmente y mide tu progreso, con paciencia y constancia, tu marca personal será no solo una tarjeta de presentación, sino un puente hacia las oportunidades que realmente te representan.

*Esta columna es desarrollada por integrantes del UCOL-CA59 La mercadotecnia y su relación con las ciencias sociales, adscrito a la Facultad de Mercadotecnia de la Universidad de Colima.

** PTC – Facultad de Mercadotecnia – SNII 1

Las opiniones expresadas en este texto periodístico de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles a El Comentario.

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