La Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó una resolución que insta a los Estados miembros a enviar de forma inmediata ayuda a Haití para fortalecer su policía, resolver la crisis social del país y que se celebren elecciones libres lo antes posible.
El texto, presentado por el Gobierno haitiano, fue avalado durante la 53 Asamblea General de la OEA, celebrada en Washington con la presencia de varios cancilleres de la región, incluido el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
La resolución subraya “la necesidad de que la OEA preste asistencia inmediata a Haití” para la seguridad, la protección de los derechos humanos y la convocatoria de elecciones “tan pronto como las condiciones lo permitan”.
Asimismo, insta a aquellos Estados que “estén en condiciones de hacerlo” a que “brinden ayuda inmediata y fondos específicos” al país caribeño.
En concreto, propone suministrar equipos y formación a la Policía Nacional de Haití para combatir las bandas y los secuestros, así como para mejorar la seguridad fronteriza y portuaria del país y eliminar el tráfico de armas de fuego.
Paralelamente, invita a los Estados a que suministren “asistencia en materia de derechos humanos, asistencia electoral y fortalecimiento de la democracia”.
Además, hace un llamamiento para que los países de la región “consideren participar en una misión integrada de seguridad y de asistencia en materia humanitaria y electoral en Haití”.
El Gobierno haitiano solicitó oficialmente el pasado octubre la intervención de una misión internacional para ayudar a la Policía Nacional contra las pandillas, una iniciativa que todavía no se ha cristalizado a falta de encontrar un Estado dispuesto a liderarlo.
Esa operación fue respaldada por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, quien propuso establecer una “fuerza de acción rápida” compuesta por militares de uno o varios países y no bajo bandera de la ONU.
Estados Unidos y Canadá han impulsado conversaciones sobre esta cuestión, pero hasta el momento no han mostrado intención de encabezar la operación.
Según datos recopilados por la ONU, la violencia por parte de las pandillas en Haití alcanzó en 2022 niveles no vistos en décadas, con un fuerte aumento de los homicidios, hasta un total de 2,183, y 1,359 secuestros, más del doble que el año anterior.
Las guerras entre grupos armados se han cebado con barrios de Puerto Príncipe, con francotiradores disparando desde azoteas a hombres, mujeres y niños y con continuas denuncias de agresiones sexuales, una táctica que se está utilizando para sembrar el miedo y destruir el tejido social, según la ONU.