La Fiscalía General de la República abrió una investigación por delincuencia organizada tras la explosión de un automóvil frente a la base de la Policía Comunitaria de Coahuayana, Michoacán, ocurrida el pasado sábado (06) y que dejó 5 muertos y 12 heridos. La dependencia informó que trabaja en coordinación con el Gabinete de Seguridad y autoridades estatales para esclarecer los hechos.
En la zona operan 15 peritos del Centro Federal Pericial Forense y 11 policías federales ministeriales de la Agencia de Investigación Criminal, especialistas en criminalística, medicina, genética, incendios, explosivos, telecomunicaciones e ingeniería. Según autoridades, 2 de las víctimas viajaban en el vehículo siniestrado y 3 pertenecían a la Policía Comunitaria local.
La detonación, registrada alrededor de las 11 de la mañana en la calle Ignacio López Rayón, ocurrió frente a la base encabezada por Héctor Zepeda Navarrete, alias “El Comandante Teto”, exintegrante de los grupos de autodefensa surgidos en 2014. En esta región operan Guardia Civil, Guardia Nacional, Ejército y Marina, debido a la disputa entre policías comunitarias y el Cartel Jalisco Nueva Generación por rutas de tráfico de drogas.
Michoacán, con 270 kilómetros de litoral en el Pacífico, es zona clave para el trasiego de cocaína. La Marina ha detectado que habitantes de la franja costera colaboran con células criminales en la recolección y traslado de cargamentos. La explosión ocurre en un contexto de refuerzo de seguridad en el estado tras el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, el pasado 10 de noviembre.

