La Comisión Europea (CE) dio luz verde al inicio de negociaciones de adhesión con Ucrania, Moldavia y Bosnia-Herzegovina, mientras que recomendó que se le conceda a Georgia el estatus de país candidato.
“Hoy es un día histórico porque la Comisión recomienda que el Consejo inicie negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia”, dijo la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, en una rueda de prensa.
Añadió que la Comisión recomienda la apertura de negociaciones de adhesión a la Unión Europea (UE) con Bosnia-Herzegovina “una vez que se alcance el grado necesario de cumplimiento de los criterios de membresía”.
Sobre Georgia, a la vista de los resultados obtenidos, la CE recomienda al Consejo que conceda a Georgia el estatuto de país candidato, quedando entendido que adoptará una serie de medidas.
El Ejecutivo comunitario presentó hoy los informes sobre el progreso de los 10 países con aspiraciones a integrarse en la UE.
Von der Leyen dijo que aunque Ucrania sigue enfrentándose a “tremendas dificultades y tragedias” provocadas por la guerra de agresión de Rusia, “los ucranianos están reformando profundamente su país, incluso mientras luchan en una guerra que es existencial para ellos”.
El país ha llevado a cabo “más del 90%” de los pasos que la CE le pidió el año pasado cuando recomendó que se convirtiera en candidato, y los principales avances los ha logrado en la reforma de la justicia, el programa anticorrupción, la lucha contra el blanqueo de capitales, la limitación de la influencia de los oligarcas sobre la vida pública, la nueva ley de medios de comunicación o el trato de las minorías nacionales.
“El resto de reformas ya están en marcha”, celebró Von der Leyen, quien recomendó además que el Consejo (los Estados miembros) adopte un marco de negociación una vez que Ucrania haya llevado a cabo las reformas en curso, algo sobre lo que informará la CE en marzo del año que viene.
En cualquier caso, dejó claro que los líderes de la UE podrían tomar ya en su próxima cumbre, en diciembre, la “decisión política” de abrir las negociaciones para la entrada de Ucrania si aceptan la recomendación de la Comisión.
“El trabajo puede empezar inmediatamente, es muy técnico”, aseguró, y recordó que Ucrania está en camino de concluir las reformas que le faltan y que en marzo la Comisión informará de su progreso.
Sobre Moldavia, Von der Leyen indicó que no se enfrenta a una guerra pero que sufre los efectos de la que se libra en Ucrania, así como los “constantes esfuerzos de desestabilización contra su democracia.
Pese a ello, aseguró que el país ha llevado a cabo “significativos” esfuerzos en reformas, como en el área de la judicatura, la corrupción o el crimen organizado, y ha realizado cambios legislativos; no obstante, la CE informará en marzo próximo sobre sus avances en las cuestiones pendientes.
Por lo que respecta a Bosnia y Herzegovina, la política alemana reconoció diferentes “pasos positivos” a nivel político y legal pero expresó “preocupación” por la legislación anticonstitucional adoptada por la República Srpska, que conforma el país junto al ente común de musulmanes y croatas.
“La puerta está abierta de par en par para dar la bienvenida a Bosnia y Herzegovina a las conversaciones de adhesión”, dijo en cualquier caso Von der Leyen, al tiempo que la animó a completar todas las reformas solicitadas.
Sobre Georgia, consideró que el estatuto de candidato a la adhesión es “un gran paso adelante” y “reconoce el impresionante anhelo de la abrumadora mayoría del pueblo de Georgia de unirse a la Unión Europea”.
La guerra “atroz” de Rusia en Ucrania supuso un “enorme impulso” en el deseo del país agredido, de Moldavia y los Balcanes Occidentales de pertenecer a la UE, que se refleja en el “ímpetu” de las reformas acometidas en todos ellos, remarcó Von der Leyen, que instó a aprovechar esa energía para terminar el “mucho trabajo que queda por delante”.