El gobierno británico aceptó las peticiones del proyecto de revisión del futbol femenino, propuesto por la exfutbolista Karen Carney, que incluye la profesionalización de la Primera y la Segunda división, la creación de un sindicato conjunto para las 2 divisiones y la retransmisión de los encuentros.
Esta iniciativa fue propuesta en julio y ahora el gobierno de Rishi Sunak ha dado luz verde a que esto salga adelante, considerándolo “el paso adecuado para el futuro del futbol femenino”.
Carney, que jugó 144 partidos para Inglaterra y es una reputada comentarista en televisión, ha sido la cara visible del proyecto y ha insistido en que el futbol femenino puede convertirse en una industria de mil millones de libras en 10 años.
“El trabajo de verdad comienza ahora. Espero que la inversión adicional y el apoyo del Gobierno sea el apoyo para que la federación inglesa y el resto de entes se unan en esta oportunidad para transformar el futbol femenino para las próximas generaciones”, dijo Carney.
La principal petición de Carney pasa por profesionalizar las 2 primeras divisiones del futbol inglés, así como crear un sindicato conjunto para las jugadoras. También se pide una mayor inversión en el futbol base y en instalaciones, consolidar un modelo para garantizar el éxito de generaciones futuras, igualar el acceso al futbol en las escuelas, que se elimine la falta de diversidad tanto dentro como fuera del campo y que se facilite a los aficionados acceder al contenido.
Para ello, una de las medidas más importantes es que se pueda retransmitir futbol femenino en la franja horaria de las 3 de la tarde en Inglaterra, algo que ahora está prohibido por ley debido al blackout o apagón. Según esta norma, amparada por la UEFA, no se puede retransmitir futbol, ni doméstico ni internacional, entre las 2:45 y las 5:15 de la tarde del sábado, con el objetivo de promover la asistencia a divisiones modestas.
“Lo que tenemos que hacer es asegurarnos de que el futbol femenino sea más comercial y atraiga más dinero de los teleoperadores, porque si conseguimos eso, se podrá pagar más a las mujeres. Así que tenemos que trabajar en la igualdad de pago y hacerlo de forma gradual, para que sea sostenible. Pero esta propuesta no es solo sobre dinero. Es también sobre unos estándares mínimos”, dijo Lucy Frazer, secretaria general de cultura en el Reino Unido.