El diputado Jesús Dueñas García criticó el actuar de las autoridades ante el fallecimiento de una menor en el Hospital Regional Universitario, donde incluso, dijo, la misma Fiscalía General del Estado no ha tenido la intención de dar una respuesta certera a esa situación.
Señaló que ni siquiera con la necropsia que hicieron a la menor de edad, pudieron salir a dar una declaración puntual y oportuna, excusándose en que la familia no había firmado el oficio de la necropsia.
El legislador villalvarense insistió en que es en verdad lamentable la situación en los servicios de salud, “y lo más triste es que no les interesa, y tan no le interesa ni a la propia gobernadora del estado, Indira Vizcaíno, que no sabe cumplir sus responsabilidades como la primera autoridad sanitaria en el estado, de acuerdo con la Constitución del estado de Colima”.
Jesús Dueñas aseguró que desde la misma Fiscalía tapan y ocultan la información, y lamentablemente lucran con la vida de una menor de edad y con la problemática que sufrió una familia que se encuentra desgarrada por la pérdida.
Insistió en que desafortunadamente la gobernadora Indira Vizcaíno “sigue evadiendo su responsabilidad argumentando que ha entregado ambulancias, que se cuenta con el 85% de abastecimiento de medicamentos, y que las cosas están de maravilla en el sector salud, cuando lo que hoy estamos viviendo es la realidad de lo que está sucediendo en el Hospital Regional Universitario, hoy Hospital de Especialidades IMSS-Bienestar”.
Si bien es cierto que antes había cosas que cambiar, precisó, “lo cierto es que a 2 años de este Gobierno las cosas se han recrudecido y no se ve ningún avance, al contrario, estamos peor que antes y la gente misma lo ha señalado constantemente”.
Dueñas García dijo que, aunado a esta situación, hay que agregarle la falta de certeza laboral de más de 150 enfermeras y enfermeros, “a quienes tuve la oportunidad de recibir en el propio Congreso del Estado, que, entre lágrimas, incertidumbre y mucho coraje, señalaban que habían sido engañados por el Gobierno del estado”.
Chuy Dueñas afirmó que su enojo es justificado, ya que se les prometió una base en el IMSS-Bienestar: “Les hicieron firmar una renuncia, les entregaron un supuesto certificado de su base que no les entregaron en físico, solamente les permitieron tomar una fotografía de ese certificado y hoy lo único que tienen esas 150 enfermeras y enfermeros, es la incertidumbre de no saber qué es lo que va a pasar a partir del 31 de diciembre que se vence su contrato”.
Todo eso, insistió, está pasando en el sector salud, “y no puede ser posible que personal que se jugó la vida durante todo el proceso de la pandemia, que estuvieron ahí, convencidos de atender a las familias colimenses, hoy estén recibiendo una cachetada de parte de la gobernadora y estén recibiendo el desinterés del Gobierno de México, al no generarles las condiciones y la certeza laboral”.
