El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo estar “profundamente preocupado” por la operación militar israelí a gran escala en la ciudad palestina de Yenín, en Cisjordania, con un despliegue que no se veía desde hace 2 décadas.
En una declaración escrita de solo 2 líneas, Guterres dijo que las operaciones militares “deben ser dirigidas con respeto absoluto a la ley internacional humanitaria”, aunque no menciona en ningún momento a Israel.
El ataque de Israel contra supuestos centros de entrenamiento armado de grupos palestinos en el campo de refugiados de Yenín se ha saldado ya con 8 muertos, de los que al menos 3 son menores, según el ministerio de Sanidad palestino.
“No es una invasión, ni una operación contra la Autoridad Palestina, ni contra los palestinos. Es contra los terroristas que operan dentro del campamento de Yenín”, afirmó el portavoz militar israelí, Daniel Hagari.