Terry Killens hará historia en la NFL al ser la primera persona que disputó un partido por el trofeo Vince Lombardi, lo hizo con los Tennessee Titans en la edición XXXIV, y en arbitrar en un Super Bowl, lo que hará el próximo domingo.
Killens, árbitro de la NFL desde el 2019, será parte del grupo de oficiales que estará encabezado por Bill Vinovich, que sancionarán el duelo entre los Kansas City Chiefs y San Francisco 49ers el próximo domingo en el Allegiant Stadium de Las Vegas, Nevada, en el Super Bowl LVIII.
“Es un gran logro. Es la culminación de un arduo trabajo y la dedicación que he puesto. Es una recompensa y un gran agradecimiento a todas las personas que me han ayudado en el camino y que me dieron estas oportunidades”, dijo sobre esta oportunidad.
En su etapa de jugador, Terry Killens llegó a la liga seleccionado en la tercera ronda del Draft de 1996 por los entonces llamados Houston Oilers, que pasaron a convertirse en los Titans.
En esa franquicia permaneció hasta 2001. En la temporada de 1999 fue parte de los Titans que perdieron el Super Bowl XXXIV ante los Rams.
En su carrera como defensivo el nacido en Cincinnati, Ohio, actuó en 91 partidos, la mayoría con Oilers–Titans, sus 2 últimos equipos en la liga fueron 49ers y Seahawks.
En total sumó 83 tackleadas, 32 de ellas en la temporada que llegó al Super Bowl.
Luego de su retiro, el exapoyador aceptó que fracasó en su intento por convertirse en entrenador, más tarde descartó ocupar una posición como directivo.
Entonces pensó en convertirse en árbitro y recorrió todo el proceso. Empezó en los juegos de secundaria, luego participó en los partidos de la División III y División I, hasta que recibió la bienvenida como oficial a la NFL en el 2019.
“Cuando me retiré buscaba ese sentimiento que tenía cuando era jugador, esa camaradería, esa sensación de vestuario. Cuando entré en esto, comencé a amar el futbol de nuevo. Es un gran logro”, concluyó.