Sobesednik se convirtió hoy en el primer periódico ruso que abre en su portada con el líder opositor, Alexéi Navalni, que murió hace 5 días en prisión, de lo que la familia, la oposición y Occidente responsabilizan al Kremlin.
“¡Aún hay esperanza!”, reza la portada del semanario que se puede comprar en los quioscos de Moscú.
El periódico, que cuesta 72 rublos (unos 0.75 euros), incluye en su primera página una gran foto de Navalni sonriendo y saludando con la mano.
En páginas interiores el rotativo recoge las informaciones sobre la muerte del opositor y las acusaciones de la viuda, Yulia Naválnaya, contra el presidente ruso, Vladímir Putin.
Además, desglosa los principales hitos de la carrera política de Navalni y las reacciones a la tragedia de figuras críticas con la política del Kremlin.
“Rusia es un país feliz. En el a veces nacen Navalnis”, destaca uno de los subtítulos de Sobesednik (Interlocutor en ruso).
También incluye comentarios de ciudadanos rusos e imágenes de cómo depositan flores en su memoria en todo el país.
La prensa y la televisión rusa, controladas por el Estado, ignoraron completamente la muerte de Navalni, con la honrosa excepción del diario económico RBC.
Los que sí se hicieron profusamente eco son los medios que representan a la prensa libre en el exilio, que acusaron abiertamente en sus editoriales a las autoridades de cometer un asesinato.