El Gobierno de Australia pidió a Irán que evite “contribuir” a una escalada del conflicto en Medio Oriente, después de que Teherán amenazara con atacar a Israel en represalia por un ataque atribuido al Ejército israelí contra un consulado iraní en Siria que dejó 7 muertos.
“Australia está profundamente preocupada por los indicios de que Irán está preparando una acción militar contra Israel”, dijo en X la ministra de Exteriores del país oceánico, Penny Wong.
Wong también explicó que sostuvo una conversación telefónica con el ministro de Exteriores de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, para pedirle que use su influencia en la región “para promover la estabilidad, no (para) contribuir a la escalada” de enfrentamientos.
“Un nuevo conflicto no hará sino agravar la devastación en Medio Oriente”, subrayó la jefa de la diplomacia australiana al alertar también que un eventual ataque a Israel podría provocar el cierre del espacio aéreo y problemas en los vuelos comerciales.
El llamamiento de Wong se da después de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, realizara la víspera una ronda de llamadas con sus homólogos de Turquía, China y Arabia Saudí para intentar disuadir a Irán de emprender un ataque contra Israel.
Teherán lleva varios días indicando que planea atacar al Estado judío en represalia por el ataque atribuido al Ejército israelí contra el consulado iraní en Damasco la semana pasada que mató a 7 miembros de la Guardia revolucionaria iraní, además de destruir el edificio anexo a la embajada de Teherán, que era la residencia del embajador iraní.