La suspendida fiscal general de Perú, Patricia Benavides, afirmó este jueves que es víctima “de una arbitrariedad” motivada “por intereses políticos” que, según dijo, ha llevado a que la Junta Nacional de Justicia (JNJ), el máximo órgano de la Judicatura peruana, plantee destituirla de manera definitiva del cargo.
“Estoy aquí para defenderme de una arbitrariedad”, sostuvo Benavides al presentarse ante los magistrados de la JNJ para responder a un informe que pide su destitución por faltas funcionales graves, elaborado por la integrante de ese organismo Inés Tello.
La fiscal suspendida dijo a los miembros de la junta que la decisión que tomen puede “enterrar el debido proceso” en su país y que se ha actuado “a la medida de los intereses políticos” que llevaron a su suspensión.
“El informe de la instructora Tello expresa la venganza y el odio de quienes encontraron en mí el obstáculo para controlar el Ministerio Público”, sostuvo antes de decirle a los magistrados que “su función constitucional les exige ser imparciales”.
Agregó que Tello ha formulado un “informe espurio y fantasioso” que, en su opinión, “debe irse al archivo”, porque “carece de calidad técnica”.
“No tengo miedo a la destitución porque sé que la justicia prevalecerá, no he venido a pedir compasión, vengo a luchar con dignidad para salvar mis años de servicio al Perú”, remarcó.
Su abogado, el exprimer ministro Jorge del Castillo, se quejó porque no se aceptó su solicitud para que se reprograme la audiencia de este jueves para tener un plazo mayor para preparar su defensa y preguntó a los magistrados por “la celeridad o el apuro de tener que decidir hoy este tema”.
“Si hay una decisión condenatoria, nos están abriendo las puertas para reclamar en todas las áreas respectivas, por el abuso de autoridad que están cometiendo”, añadió antes de solicitar “la nulidad del informe de la doctora Inés Tello”.
El informe que plantea la destitución
El informe presentado por Tello responde a un procedimiento disciplinario abierto contra Benavides por la remoción de fiscales que investigaban el caso de corrupción en los tribunales del Callao, denominado “Los Cuellos Blancos del Puerto”.
Tello indicó que se encuentra “debidamente comprobado” que Benavides dio un “trato degradante” a Bersabeth Revilla al forzar su salida de la Segunda Fiscalía Suprema Transitoria Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos, cuando investigaba a la jueza Enma Benavides, hermana de la suspendida fiscal general, lo que representa un falta muy grave.
El informe agregó que Benavides también “interfirió” en la investigación fiscal contra su hermana, sin regirse a sus deberes como fiscal suprema y titular del Ministerio Público.
Recomendó, en ese sentido, que también se destituya a la hermana de Benavides, cuestionada por la presunta liberación de sentenciados por delitos graves, entre ellos narcotráfico.
La magistrada Tello también planteó abrir una investigación preliminar contra el fiscal supremo Pablo Sánchez y reservar el pronunciamiento sobre si corresponde abrir investigación preliminar contra el juez supremo Juan Carlos Checkley por supuestamente haber demorado en el proceso contra la hermana de la suspendida fiscal general.
Patricia Benavides cumple una suspensión de 6 meses del cargo de Fiscal de la Nación (general) dictada por la JNJ mientras es sometida a un proceso por presuntamente liderar una red de tráfico de influencias al interior del Ministerio Público.
Tras la medida disciplinaria aplicada contra Benavides, el Congreso, en su mayoría opositora, inició una serie de procesos para intentar remover a los integrantes de la JNJ por presuntas irregularidades, aunque esa medida solo se aprobó para dos de los magistrados, entre ellos Tello, pero luego un tribunal ordenó que fueran repuestos en sus cargos.
