La Cancillería anunció que investiga a Leopoldo Michel Díaz, cónsul adscrito de México en Shanghái, China, tras aparecer en un video donde agrede verbalmente al cónsul general, Miguel Ángel Isidro Rodríguez, y a un empleado.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) precisó que “se han tomado medidas de protección y se han iniciado los procesos disciplinarios correspondientes para atender los recientes acontecimientos registrados en el Consulado General de México en Shanghái”.
Esto, abundó, para deslindar las responsabilidades correspondientes “y garantizar la seguridad del personal que ahí labora”.
La reacción de la Cancillería mexicana se da en respuesta a un video que comenzó a circular este jueves en el que se aprecia que Michel Díaz insulta con palabras altisonantes a Isidro Rodríguez.
De acuerdo con información del medio La Silla Rota, la discusión se inició cuando Michel Díaz se negó a emitir una visa a un solicitante, lo que generó el descontento de los trabajadores y del cónsul general.
Tras los reclamos, el diplomático confrontó con groserías y burlas a uno de los trabajadores del consulado, a quien le ordenó otorgar la visa.
“No se haga pendejo (tonto)… Tu jefe soy yo también. Él (Isidro Rodríguez) es el jefe máximo, pero yo también soy tu jefe”, grita el cónsul adscrito al personal consular.
Los insultos se extienden después al cónsul Isidro Rodríguez, quien llega a la oficina donde pelean el cónsul adscrito y un trabajador.
“Buenos días. ¿Qué está pasando aquí? ¿Qué está pasando aquí?”, cuestiona el cónsul general al adscrito.
“A mí no me hablas así tú, no me hablas así porque esa no es tu oficina. Esta es oficina del Gobierno de México y yo soy tan funcionario del Gobierno de México como tú”, responde Michel Díaz visiblemente alterado y se escucha decir varias groserías.
Luego de un intercambio de palabras, el cónsul adscrito amenaza al general: “¡Te parto tu madre! (te golpeo), ¡eres un culero (cobarde), eso es lo que eres!”
Pese a las peticiones de que se calme y deje la oficina, el cónsul adscrito permanece insultando por varios minutos hasta que por fin se aleja mientras que los trabajadores y el cónsul se retiran a sus oficinas.