Tras los enfrentamientos y bloqueos en Culiacán, Sinaloa, este viernes 30 de agosto se registró tráfico moderado y escuelas con pocos alumnos, un día después de los hechos, a pesar del llamado de las autoridades a regresar a la normalidad.
Desde temprana hora, según publica Excélsior en su edición web, los parques públicos utilizados para ejercitarse lucían más tranquilos de lo habitual. En las principales calles y avenidas de la ciudad, el tráfico era notablemente más bajo en comparación con cualquier otro día de la semana.
En las secundarias, preparatorias y universidades, que son las primeras en comenzar las clases, la ausencia de alumnos era evidente. Los pasillos de las escuelas estaban vacíos y, en varios planteles, las aulas estaban solas.
Luego del enfrentamiento, refiere Excélsior, la Secretaría de Educación Pública y Cultura emitió un comunicado llamando a los alumnos a asistir a las aulas, y algunas universidades y escuelas privadas también aseguraron que sería un día normal. Sin embargo, esto no se reflejó en la asistencia escolar.
La alianza de transporte público garantizó el servicio desde temprano, pero, a pesar de que los autobuses estaban presentes en los sitios oficiales, aquellos con rutas hacia las escuelas iban casi vacíos.
Desde el jueves por la tarde, cuando se produjeron los primeros bloqueos, los directivos de los planteles educativos pidieron a los padres recoger a los alumnos de nivel básico y dejaron salir sin problema a los niveles más avanzados, por temor a que la situación de violencia pudiera extenderse.
Asimismo, precisa el diario nacional, algunos lugares de trabajo y comercios también ajustaron sus horarios. Por la noche, plazas comerciales, restaurantes, bares y centros nocturnos bajaron sus cortinas por precaución y ante la ausencia de visitantes.
Con información de Excélsior