La LectioBrevis en la Facultad de Derecho: la ejemplaridad y el currículum oculto del profesor universitario
Por Oscar Daniel Arellano Delgado*.
Las experiencias e ideologías de un profesor de Derecho influyen en el desarrollo del alumnado y futuros abogados. Esto fue explicado por el Doctor Diego Robles Farías en el acto inaugural del semestre Agosto-Enero del 2024-2025 en la Facultad de Derecho de la Universidad de Colima. ¿Pero a qué se refiere el “currículum oculto”?
Primero debemos entender que esto no es lo mismo que el “Currículum Vitae”, el cual contiene los logros académicos y laborales durante la vida de un individuo en cara a una formación profesional, sino que, este tipo de currículum “intangible” contiene las experiencias y vivencias de cada persona, su forma de ser, su actuar, sus gustos, preferencias, ideologías, lo que no le gusta y lo que rechaza. Si esto no se sabe dividir del “yo docente” y el “yo persona”, sumado a un bajo o nulo sentido crítico del estudiante, generará abogados sin un criterio enteramente propio, el curriculum oculto es un cúmulo de experiencias culturales familiares, sociales e ideológicas.
Una persona tendrá razones del porqué le gusta o no algo, son experiencias propias que se han dado a lo largo de la vida, sin embargo, debe entenderse que en un espacio como el aula no debe mediar la subjetividad entre la enseñanza de una materia y el aprendizaje de los alumnos. Si un profesor se dedica a expresar su opinión propia u omite temáticas de su materia por considerarlas poco adecuadas influirá, probablemente de manera parcial, en la formación de sus alumnos.
El ideal sería que el camino a seguir fomente en el alumno y alumna la capacidad de cuestionar, dudar e informarse de los contenidos producto del proceso de enseñanza aprendizaje. Este contenido, que forma parte del currículum formal, no debe ser presentado como completamente falso o verdadero; más bien, se debe incentivar a los estudiantes a verlo como un medio para el desarrollo del pensamiento crítico, de manera que cada uno forme su propio criterio y entienda su realidad a través del estudio y los cuestionamientos sobre el tema en cuestión.
El docente debe ser un ejemplo para el alumno, pero está obligado a serlo en cuestión de conocimientos y métodos de enseñanza, no por mediar ideologías y cuestiones psicológicas en la aplicación de la asignatura. No se trata, por poner un ejemplo, de la “Teoría del Derecho según tal profesor”, se trata únicamente de la “Teoría del Derecho”.
El currículum oculto influye durante la formación de los próximos abogados y también sus futuros. Sus percepciones sobre ciertos temas que son relevantes en la sociedad o en sus áreas laborales, se verán envueltas en ideologías inculcadas de forma oculta o directa, un ejemplo de ello puede ser el asunto de la reforma al Poder Judicial, actos del gobierno, situaciones políticas internas o externas, interpretación de normas, códigos o sus formas de actuar y defender a sus clientes.
¿Significa esto que no debe darse una opinión al momento de enseñar? No, no es algo tan radical. Durante todo el proceso de enseñanza, como ya se había mencionado antes, debe darse un ambiente crítico, abrir espacios de debate y razonamiento entre el salón y el docente que no deben “combatir” entre sí, para resultar como ciertas o falsas, sino que deben abrir el entendimiento de los estudiantes y que ellos mismos decidan qué apoyan y qué rechazan.
*Estudiante de tercer semestre de la Facultad de Derecho de la Universidad de Colima
** Esta columna forma parte del “Semillero de Formación de Jóvenes en
Investigación Jurídica” coordinado por el Doctor Amado Ceballos Valdovinos
Las opiniones expresadas en este texto periodístico de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles a El Comentario.
