Jue. Ene 9th, 2025

COLUMNA: Ciencia y futuro

Por Redacción Ene9,2025 #Opinión

Reto agroalimentario y transformación digital en el estado de Colima

Por Óscar Mares Bañuelos*

De acuerdo con datos del 2022 del Servicio de Información Agroalimentaria y pesquera (SIAP) de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER antes SAGARPA) se ha tenido una producción agroalimentaria rentable en el país. En este contexto, en donde en los últimos años se han vivido la afectación de una pandemia de orden global y una guerra entre Rusia y Occidente, que ha impactado a las economías como nunca, cabe la mención que la seguridad alimentaria es seguridad nacional.

En este mismo sentido, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) considera como un bastión agroalimentario a México y el Valle de Tecomán, lo es también, al pertenecer a la zona centro occidente, que es la más productiva en el país; además representa la producción de 4 sistemas producto en los primeros lugares nacionales e internacionales.

En el presente artículo, centramos su análisis en la aplicación y evaluación de tecnologías IoT (internet de las cosas) en los sistemas de producción agrícola y lo que en términos de eficiencia representan para esta labor humana.

La convergencia entre los sistemas de producción agrícola, los sistemas de administración científica y la intervención de proyectos de base tecnológica, representa una constante para la academia, en esta triple hélice de la gestión económica y social con nuestro entorno:

  • Tecnologías IoT para la producción agrícola
  • Evaluación de análisis clásicos versus disruptivos, aplicados al campo
  • La importancia que tienen los proyectos de base tecnológica, en el desarrollo del contexto socioeconómico

En el primer aspecto, las Tecnologías IoT se evalúan en términos de su eficiencia relativa, de sus ventajas y desventajas, considerando tiempo, costo y alcance, como lo define la guía de proyectos del PMI (Project Management Institute), conocida como PMBOK (Project Management Body of Knowledge).

El segundo aspecto trata sobre dos estudios aplicados a plantas de banano a casi 2 hectáreas, denominado análisis de suelo, el cual es de corte clásico, realizado in situ, por el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) con un costo aproximado de 2,500 pesos por hectárea. En 2022, ha sido contrastado con un análisis satelital de cultivos de tipo disruptivo, mediante colorimetría, fotometría y espectrometría realizado por el Clúster TI Colima, A.C. en 2020, cuyo costo aproximado fue de 300 pesos por hectárea. En ambos se requiere el análisis e interpretación del profesional de la ingeniería agrónoma para el plan de producción agrícola correspondiente. En este caso el de plátano macho, para un promedio de 1800 plantas.

Con referencia al tercer aspecto, se documenta la experiencia de desplegar y gestionar proyectos de base tecnológica, en los cuales participan la academia y la sociedad organizada. En este caso se trata de la intervención del INIFAP, el Clúster TIC y un cuerpo colegiado de la Universidad de Colima, con la participación de un pequeño productor del Valle de Tecomán, referenciado en párrafos anteriores con datos del SIAP 2022 como bastión agroalimentario y destacando cuatro sistemas-producto: coco, limón, plátano y papayo, que se ubican en los primeros lugares nacionales e internacionales de producción.

Estrategias de intervención productiva

La estrategia consistió en desplegar un análisis de fertilidad de suelos: in situ (INIFAP) y satelital (Clúster TIC) para posteriormente verificar el contraste de los resultados (efectuado por el cuerpo académico UCOL-111) considerando que el estudio permitirá al productor contar con un plan de acción para mejorar sus procesos productivos, al gestionar planes de acción productivos.

Bajo un enfoque descriptivo y experimental, es que se ha intervenido una siembra de plátano de casi 2 hectáreas, en media densidad a la vera de un canal de agua en el Valle de Tecomán. En suelo-franco arenoso, ambos estudios realizados previo a la floración:

  • Análisis con datos empíricos de agro irrigación
  • Análisis mediante satélite para cultivos
  • Fertilidad de suelos in situ

Es menester recalcar la importancia en el sistema económico local y nacional que la agroindustria en Colima procesa cada año aproximadamente un millón 150 mil 643 toneladas de productos agrícolas y pesqueros, destacando caña de azúcar, limón, maíz, arroz, copra, mango, naranja, café, leche, atún, harina de pescado y miel de abeja. A los mercados de exportación se destinan 264 mil 324 toneladas de agroproductos colimenses, lo que representa alrededor del 13.4% de la producción promedio anual de la entidad. Destacan el limón mexicano, melón, sandía, plátano, mango y papaya. Otros productos que se exportan en menor escala son el jitomate, chile, pepino y zarzamora; posicionándose esta última en el mercado estadounidense por su calidad y vida de anaquel.

Se convierte pues, la producción agroalimentaria en un asunto de interés nacional y el tema de la seguridad alimentaria para nuestro país y para nuestra región, pero también nos llena de satisfacción saber que existen caminos que permitirán en un futuro inmediato, el desarrollo de la capacidad productiva del campo mexicano, bajo el empleo de nuevas tecnologías y una administración responsable basada en la ciencia.

Para conocer más sobre el presente tema puede consultar el siguiente enlace:

http://orizaba.tecnm.mx/cim/Journals/2023_Journal_CIM.pdf

*Profesor investigador de la Facultad de Contabilidad y Administración del campus Tecomán de la Universidad de Colima e imparte docencia en las maestrías en Transformación Digital y en Alta Dirección de la misma institución.

Las opiniones expresadas en este texto periodístico de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles a El Comentario.

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