Por Maestra Ruth Holtz
Año nuevo, propósitos… no son nuevos, son los del año pasado: bajar de peso, hacer ejercicio, cambiar de trabajo, dejar a esas amistades, vencer una adicción, estudiar inglés, leer más, deshacerse de cosas acumuladas, hacer limpia de closet, cambiar el carácter iracundo, despertarse más temprano, etcétera. Es grandioso proponerse metas, es aún mejor lograrlas.
¿Por qué fracasamos? Una de las razones fundamentales por la que nuestros propósitos de año nuevo no los cumplimos es porque no estamos dispuestos a un cambio de vida, de hábitos, de forma de ser sostenida. Para ello es necesario ir a la raíz de esos males. Por ejemplo, bajar de peso no es sólo someterse a dietas restrictivas, sino enfrentar las razones por las que nuestro cuerpo ha engordado. A veces no es la ingesta, sino la inflamación, a veces no es cuánto comes, sino qué o inclusive unas veces es por qué no te sientes bien en tu vida y lo compensas comiendo. Soltar, dejar ir personas o un trabajo agobiante puede ser difícil. Hay un punto en el que nos sentiremos solos, vacíos o quizá con miedo a que no tenga suficientes recursos para conseguir un mejor medio de manutención. ¿Por qué acumulo? ¿Tengo miedo de la carencia? Será que no puedo deshacerme de prendas que me recuerdan la persona que era o un pasado que no quiero dejar atrás. Cambiar el carácter es más complejo. Hay que averiguar las razones más profundas de la forma de ser de alguien y reconocer si su enojo es válido y hasta sano pues se opone a algo que habrá que validar.
Un cambio no es sólo dar los primeros pasos, sino mantenerse por ese nuevo rumbo hasta lograr los objetivos o incluso volverlo parte de la vida. Sostenerse en buenos hábitos implica disciplina, orden, organización del tiempo, constancia, perseverancia y pasión para realizar lo propuesto.
En general se trata de un proceso, no de una decisión de momento y ya. Se trata de reconocer cuando requerimos apoyo y/o presión. Ir a un gimnasio, tener entrenador; ir al nutriólogo, seguir una dieta monitoreada; tener guía de lectura o una psicoterapia para investigar las causas profundas de lo que me resisto a cambiar.
Que tus propósitos de año nuevo no sean los mismos siempre significa que los cumples y que no traicionaste las promesas que te hiciste a ti mismo. Dejar el pasado atrás, soltar y proponerte nuevas experiencias a veces requiere apoyo psicoterapéutico. La mejor inversión es en uno mismo. Después de todo tú eres el genio que te concede los deseos de tu corazón. ¿Qué hay en él?
* Psicoterapeuta. Teléfonos: 312 330 72 54 / 312 154 19 40 Correo: biopsico@yahoo.com.mx
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