La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) reconoció “desafíos” tras el primer día de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, y pidió abordar la migración como una oportunidad económica y no como una amenaza para que no se entorpezca la cooperación bilateral.
“Las recientes declaraciones del presidente Donald Trump durante su discurso inaugural, en las que anunció la declaratoria de emergencia nacional en la frontera con México y la deportación masiva de migrantes en situación irregular, presentan desafíos significativos para la relación bilateral”, señaló en un comunicado.
La organización empresarial señaló que, si bien las medidas anunciadas, como la militarización de la frontera y las deportaciones masivas de migrantes, atienden “preocupaciones internas de seguridad en EUA, impactan directamente a millones de familias mexicanas y generan un clima de incertidumbre”.
“Los migrantes han sido una pieza clave en el desarrollo y crecimiento de sectores estratégicos y del PIB en Estados Unidos y contribuyen de manera invaluable al bienestar social y económico de ambos lados de la frontera”, agregó la asociación con más de 36 mil negocios, responsables del 30% del Producto Interno Bruto (PIB).
En este sentido, Coparmex reiteró su compromiso con los derechos humanos y un México competitivo, al destacar la importancia de un enfoque basado en el diálogo y la cooperación en lugar de políticas unilaterales.
Además, comentó que la designación de los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas representa una postura contundente contra el crimen organizado, pero contrastó que debe considerarse el respeto pleno a la independencia y soberanía de México.
“Los retos de seguridad compartidos requieren estrategias bilaterales que prioricen la colaboración, la inteligencia conjunta y el fortalecimiento de nuestras instituciones, evitando decisiones unilaterales que podrían complicar el trabajo coordinado entre ambas naciones”, abundó.
Otro punto destacado por la Coparmex es la urgencia de fortalecer el Estado de derecho para atraer inversiones, generar empleo y mantener la estabilidad social en ambos territorios.
Además, recordó que México tiene la oportunidad de transitar hacia una economía basada en el valor agregado y la innovación, para dejar atrás un modelo centrado únicamente en el ensamblaje y en otras actividades intensivas de mano de obra.
“Con el 42.6% del valor final de nuestras exportaciones explicado por procesos desarrollados en nuestro país, estamos preparados para dar un salto hacia adelante. Es momento de replantear nuestra relación con Estados Unidos desde la confianza mutua y como aliados estratégicos que somos”, añadió.
La patronal reveló que se ha reunido con autoridades estadounidenses y líderes empresariales de ambos países para fortalecer los vínculos binacionales, así como para presentar su “agenda basada en el diálogo, la cooperación y los acuerdos”.