El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Colima, Eduardo Sánchez García, criticó severamente el actuar de las y los legisladores federales colimenses que votaron a favor de la reforma al Infonavit, sin tomar en cuenta las opiniones del sector obrero y patronal.
En una entrevista, el dirigente patronal expresó: “Reprobado el actuar de nuestros senadores, en especial Virgilio Mendoza y Ana Karen Hernández, que votaron a favor de una reforma sin considerar la voz, las propuestas y la opinión del sector obrero y patronal. La gente en Colima debe saber quiénes aprobaron una reforma que no garantiza transparencia, tripartismo ni rendición de cuentas. Tampoco asegura que los fondos de las y los trabajadores sean utilizados correctamente”.
El líder empresarial recordó que los recursos administrados por el Infonavit, que superan los 2.4 billones de pesos, son producto exclusivo del esfuerzo de la clase trabajadora y los patrones, sin aportación alguna del Gobierno federal.
“Estos recursos son de las y los trabajadores, fruto de su esfuerzo, trabajo y las contribuciones de los patrones. El tripartismo, como operaba anteriormente el Infonavit, aseguraba que las decisiones fueran consensuadas entre el sector obrero, patronal y el Gobierno. Ahora, con esta reforma, se pone en riesgo la correcta administración de estos fondos sin la certeza de que se logren los objetivos prometidos en la construcción de viviendas”, enfatizó.
Sánchez García señaló que Coparmex está a favor de la construcción de vivienda social con precios accesibles y condiciones humanas en cuanto a medidas, calidad y ubicación. Sin embargo, rechazó una reforma que no garantice el uso adecuado de los recursos, lo que podría derivar en proyectos fallidos como otros planteados en administraciones pasadas y la actual.
Entre los proyectos que consideró “fallidos” del Gobierno federal, enumeró a la “farmacia gigante”, que ha generado costos elevados sin garantizar el abasto de medicamentos; la refinería de Dos Bocas, cuya construcción se estimó en 8 mil millones de dólares, pero terminó costando más del triple y aún no produce gasolina ni ha logrado reducir su precio, además del Tren Maya, cuya ejecución excedió el presupuesto, los plazos previstos y sin un adecuado estudio de impacto ambiental, dañando gravemente el ecosistema y talando una cantidad considerable de árboles.
“Es por ello que nos preocupa y manifestamos nuestra oposición a que nuestros senadores reciban línea y dejen de representar al pueblo y a la gente. Reconocemos, sin embargo, el trabajo de la senadora Mely Romero, quien escuchó las propuestas y se posicionó en los puntos en los que Coparmex ha insistido”, señaló.
Sobre las acciones a tomar, Sánchez García informó que Coparmex está en coordinación con sindicatos, centrales obreras y organismos empresariales, a la espera de pronunciamientos nacionales. El objetivo, agregó, es definir líneas de acción para defender a la clase trabajadora y oponerse a lo que consideró un golpe directo a sus derechos.
“Es importante recordar que en estos recursos no hay un peso público ni del gobierno. Todo proviene de las y los trabajadores, y debemos garantizar su correcta administración y uso”, concluyó.