La Guerra de Corea: Un conflicto congelado que define la geopolítica de Asia Oriental
Por Nitza Gisela Álvarez Barrón
La Guerra de Corea, que estalló en 1950 y concluyó en 1953, no terminó con un tratado de paz definitivo, sino con un armisticio que dejó la península dividida y técnicamente en guerra hasta hoy en día. A más de 7 décadas del cese de las hostilidades, las tensiones entre el Sur y el Norte permanecen sobre la mesa, con altibajos de por medio y desafiando la idea de que el conflicto terminó. Esta disputa congelada sigue moldeando la geopolítica de Asia Oriental, y representa un peligro latente en las relaciones internacionales contemporáneas.
Para contextualizar, es necesario situarnos a mediados del siglo XX, a finales de la Segunda Guerra Mundial. El Imperio del Sol Naciente, Japón, había sido derrotado por Estados Unidos teniendo que abandonar la península coreana, y como resultado, las 2 potencias hegemónicas que regían el escenario internacional, tomaron una parte de Corea: el norte fue tomado por el bloque comunista, liderado por la Unión Soviética y con aliados como China; mientras que el sur fue tomado por el bloque capitalista, liderado por Estados Unidos, y las Naciones Unidas (ONU) como su aliado. Así pues separados por el Paralelo 38, una frontera que se volvió muy real.
El portal académico CCH dice que “Es importante subrayar que en este periodo las superpotencias desencadenan, al interior de cada zona, fuerzas políticas e instalan instituciones que obstaculizan la unidad política y territorial…” (2017). Como se menciona anteriormente, este suceso no supuso una simple partición territorial, sino que también implicó una división ideológica entre el comunismo y el capitalismo, marcada por la competencia y la búsqueda del poder, la cual afectó a miles de coreanos, marcando un antes y un después en su vida.
En el verano de 1950, Corea del Norte, con apoyo político y logístico de China y la Unión Soviética, invadió el Sur, con el objetivo de conquistar Seúl y reunificar el país bajo un gobierno comunista. Aunque inicialmente tuvo éxito, lo que no contaba era con los aliados del Sur, que les permitieron resistir la invasión y lanzar un contraataque, llegando a desplazar a los comunistas a la frontera norte que tienen con China.
Durante los 3 años siguientes se sucedieron ofensivas y contraofensivas de ambos bandos, de modo que la unión de la milicia China dificultó más la llegada a un alto al fuego, pues ambos bloques querían lo mismo: quedarse con toda la península coreana para implementar su respectivo régimen, y así, posteriormente propagarse por toda Asia. La firma del armisticio sucede hasta 1953, donde tanto como Estados Unidos y la Unión Soviética, reconocen la existencia de ambos territorios y se designa una zona desmilitarizada (DMZ) a lo largo del paralelo 38.
A día de hoy, Corea del Norte permanece bajo un régimen comunista, aislado de la dinámica internacional, asimismo es uno de los países que han desarrollado armamento nuclear, lo que genera tensiones y presiones en todo el Mundo. Por su parte, Corea del Sur, es una economía avanzada, manteniendo relaciones comerciales y diplomáticas con países como Estados Unidos y China.
La cuestión aquí es la incertidumbre que genera Corea del Norte, pues en lo que va de este siglo se ha intensificado su desarrollo armamentista, lo que añade peligrosidad y complejidad a la dinámica internacional. Así pues, Estados Unidos y China, influyen en las dinámicas de poder regionales e internacionales, pues ambos países tienen intereses estratégicos en la península coreana, lo que impacta en la delicada situación actual.
A 75 años del estallido de la guerra, la incertidumbre sigue latente y la posibilidad de que Corea del Norte y Corea del Sur firmen un acuerdo de paz definitivo ha estado en la agenda diplomática en los últimos años, especialmente desde la cumbre intercoreana de 2018 en Panmunjom, donde ambos líderes expresaron el compromiso de poner fin formalmente al conflicto.
La Guerra de Corea dejó una península dividida en dos estados con sistemas políticos y económicos opuestos, la cual persiste hasta hoy en día, silenciosa, pero técnicamente sigue ahí. Tal como lo dice Gabriel Arnone: “En aquella franja, los anhelos de conquista no han desaparecido. En ella la Guerra Fría sigue más viva que nunca.” Esta división nos recuerda que la diplomacia y la búsqueda de la paz siguen siendo esenciales para la estabilidad mundial, obligando a las grandes potencias a mantener una constante vigilancia y diplomacia, y recordándonos que la paz en la región es esencial para la estabilidad mundial.
Referencias:
Portal Académico CCH. (2017). Guerra de Corea. Portal Académico CCH. https://e1.portalacademico.cch.unam.mx/alumno/historiauniversal2/unidad3/principales-c onflictos-de-la-guerra-fria/guerra-de-corea
Arnone, A. G. (2020, 25 de junio). 25 de junio de 1950. Un armisticio sin paz a 70 años del inicio de la Guerra de Corea. Instituto de Relaciones Internacionales, UNLP. https://www.iri.edu.ar/index.php/2020/06/25/25-de-junio-de-1950-un-armisticio-sin-paz- a-70-anos-del-inicio-de-la-guerra-de-corea/mino-tecnicamente
Convart, Q. C. [Convart]. (2017). LA GUERRA DE COREA: El símbolo del enfrentamiento entre dos mundos: Vol. 46 páginas. Titivillus. https://drive.google.com/file/d/1nFEq_-BTsjFFFn5LHq-t8vF7aRkx2mXz/view
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