El 3 veces Pro Bowl, Mark Andrews, ala cerrada de los Baltimore Ravens, quedó fuera por lo que resta del año luego de que este viernes (17) se confirmó, por medio de una resonancia magnética, que tiene una fractura en el peroné y una lesión en el ligamento del tobillo izquierdo.
“Es muy difícil porque es mi muchacho. A veces es como el receptor uno. Es muy complicado porque estaba teniendo un año notable. Creo que se encontraba a un touchdown de un récord. Eso es difícil, pero ahora tenemos que hacerlo de alguna manera sin él”, lamentó el entrenador de los Ravens, John Harbaugh.
El jugador de 28 años se lesionó el jueves pasado durante la victoria 34-20 de su equipo sobre los Cincinnati Bengals en el partido que inauguró la semana 11 de la temporada 2023 de la NFL.
Se lastimó en una jugada en la que fue tackleado por la espalda por el apoyador Logan Wilson. En la acción, el tobillo izquierdo del ala cerrada quedó atrapado en la pierna de Logan mientras era derribado. Mark quedó tendido en el campo; no pudo continuar en el juego.
Este tipo de derribo llamado tackleada de cadera está bajo vigilancia de la NFL que se ha planteado prohibirla por el número de lesiones que ha provocado.
Andrews es uno de los mejores alas cerradas de la liga. Deja un hueco difícil de llenar en Baltimore, equipo en el que era una de las principales armas ofensiva del quarterback Lamar Jackson.
Hasta la semana 11 Mark sumó 45 recepciones para 544 yardas y 6 anotaciones.
Ante la lesión del ala cerrada, Logan Wilson, defensivo de los Cincinnati Bengals, recibió una cascada de críticas en las redes sociales que lo acusaron de utilizar juego sucio contra el jugador de Ravens, algo de lo que lo defendió Zac Taylor, entrenador de los Bengals.
“Logan juega con una dureza que es importante para esa posición, pero lo hace de manera correcta; creo que la gente se ha adelantado a juzgarlo, pero es un tipo al que estoy muy orgulloso de entrenar. por lo demás, es una pena que un jugador se lesiones”, dijo Zac Taylor en conferencia de prensa.
