El catarí Nasser Al-Attiyah (Prodrive), que venció con contundencia mientras los demás favoritos intentaban jugar al escondite, y el chileno Pablo Quintanilla (Honda), que ganó para rehacerse tras 2 agrías jornadas, emergieron de nuevo sobre el Dakar 2024 antes de la etapa reina del rey de los rallies.
En una jornada en la que ninguno quería ganar, sino conseguir una buena posición para no tener que abrir pista este jueves en la primera parte de la gran etapa del Dakar, a Al-Attiyah le dio igual tener que ser el primero en introducirse entre las dunas y optó por darlo todo. Se llevó una victoria de etapa que le permite colocarse segundo, arrebatándole la posición al español Carlos Sainz (Audi), ahora tercero.
No ocurrió lo mismo en las motos, en la que los principales favoritos ocuparon las primeras posiciones. Entre ellos brilló el chileno Pablo Quintanilla, que, tras 2 grandes decepciones en la tercera y cuarta mangas del rally, esta vez sí que pudo celebrar la victoria.
El pasado lunes, Quintanilla llegó primero a meta, pero una penalización le apeó de la victoria, lo que lastró al sudamericano en la cuarta etapa, en la que acabó decimonoveno y dijo adiós a gran parte de sus opciones de victoria de este rally Dakar.
La jornada también dejó noticias sobre el motorista español Carles Falcón, que a pesar de que continúa ingresado en coma inducido en el hospital de Riad, los servicios médicos del centro han autorizado el traslado del piloto a España, que “se espera que se pueda realizar en los próximos días”.
Su equipo, el TwinTrain Racing Team, explicó que el piloto sigue en la UCI y que las pruebas de seguimiento no muestran cambios, aunque los médicos saudíes autorizaron la vuelta a España de Falcón, que cuenta con un edema cerebral y una fractura en la vértebra C2, además de fracturas en cinco costillas, muñeca izquierda y en la clavícula.
Al-Attiyah no se esconde
Mientras todos los favoritos buscaban la manera para no ocupar la primera posición -el francés Sébastien Loeb (Prodrive) llegó a no pasar un waypoint para ser penalizado-, el piloto catarí tenía un objetivo claro: recuperar tiempo con respecto a Sainz y al saudí Jazeed Al Rajhi (Overdrive Racing).
Y vaya si lo consiguió. Con un tiempo de una hora, 37 minutos y 25 segundos, fue imbatible y superó en 9 minutos a Sainz, al que arrebató la segunda posición de la general por 2 minutos y 28 segundos. El tercero en discordia de esta lucha por la general sigue siendo Al Rajhi, que no obstante sigue como líder a 9’03” del catarí y a 11 minutos y 31 segundos del piloto madrileño.
Seguro de sus sensaciones sobre el Hunter en su primer año con Prodrive, Al-Attiyah aseguró al terminar la jornada que “es ahora cuando empieza el Dakar”, con el desierto del Empty Quarter y toda la segunda semana del rally por delante. Por su parte, Sainz, que se paró voluntariamente durante 3 minutos justo antes de pasar la meta para no tener que abrir pista, dijo que habría que esperar “hasta pasado mañana para saber si la estrategia fue un error o un acierto”.
Barreda lucha por seguir en el renacer de Quintanilla
Quintanilla fue el protagonista del día en una jornada que también tuvo más novedades en la categoría a 2 ruedas del Dakar. El botsuano Ross Branch (Hero) recuperó el liderato perdido en los últimos días por 74 segundos, debido a que el chileno Nacho Cornejo (Honda) no encontró un buen rito sobre las dunas.
Sin embargo, también tuvo una novedad negativa, pues al español Joan Barreda (Hero), la gran esperanza española en las motos, se le venció la moto sobre su pecho y ahora tiene “mucho dolor” en el esternón. Barreda, que saldrá segundo este jueves en el Empty Quarter, dijo que se probará a la salida, “pero todo dependerá del dolor”.
“Voy a probar, pero todo dependerá del dolor. Yo quiero salir y meter gas”, incidió Barreda, que ha recalcado en las últimas semanas que este será su último Dakar.
Abandono de Toni Vingut en quads y Farrés dice adiós a sus opciones
El que sí que tuvo que abandonar el rally obligado fue el piloto de quads español Toni Vingut (Visit Sant Antoni-Ibiza), al caerse y fracturarse un brazo, el coxis y al menos 5 costillas. Vingut destacó que se salió despedido hacia abajo al dar gas cuando pensó que la duna ya había acabado, pero aún quedaba un trozo más, que además estaba cortada por el viento. Así, será operado de urgencia en la localidad de Al Hofuf (Arabia Saudí).
La misma mala suerte corrió el también español Gerard Farrés (South Racing), quien llegó más allá de las 9:30 de la noche al vivac de Shubaytah después de haber volcado su SSV, que lideraba la general, a eso de las 2:35 de la tarde. Fueron más de 7 horas que ayudaron a digerir la crudeza de esta carrera y la dolorosa acción en la que su SSV volcó y recorrió unos 70 metros dando vueltas de campana, según comentó Farrés a su llegada a la “ciudad ambulante” del Dakar.
En camiones, el checo Martin Macik (MM Technology Team) se aprovechó de los contratiempos del neerlandés Janus van Kasteren (Boss Machinery) y el checo Aleš Loprais (Instaforex) y venció por algo más de un minuto al neerlandés Mitchel van den Brink (Eurol Rallyesport), mientras que van Kasteren sigue líder con 22 minutos sobre Macik.