Imagina tus vacaciones
Por Alejandro Bernal Astorga
Las vacaciones pueden ser un espacio de descanso físico y mental, una pausa para cargar baterías, aprender y disfrutar; al pasarlas en casa o viajar, disfrutarlas en solitario, en familia o con amigos, pueden vivirse experiencias únicas y momentos de esparcimiento, cultura, aventura y descanso.
Imagina que investigaste y elegiste con conocimiento de causa tu destino, por sus características, atractivos naturales, históricos, culturales, espacios de diversión y sobre todo por la emoción que despierta en ti y las experiencias que puedes vivir.
Imagina que planeaste y ahorraste para financiar tus vacaciones y que tomaste una decisión responsable al sujetarte a un presupuesto para hacer rendir al máximo tu dinero y no comprometer tus finanzas personales o familiares. Imagina que eres consciente y sabes que después de todo hay vida, gastos ordinarios o programados, así como el pago de deudas contraídas, antes o después de las vacaciones.
Si la decisión fue salir del estado, imagina que cotizaste por lo menos con tres empresas la transportación, hospedaje, tours o que compraste en línea boletos para espacios de diversión, museos, acuarios, eventos deportivos, etc. que, además, suelen ser más baratos que cuando los compras en físico, eliminando la posibilidad de no alcanzar cupo o hacer filas.
Diseñar un itinerario te permitirá administrar el tiempo, para conocer, recorrer, descansar y llevar a cabo todas las actividades que querías realizar; tener momentos libres y no pautados también es válido para disfrutar de experiencias espontaneas.
Si al término de este periodo afirmas “que es hora de descansar de las vacaciones” con un dejo de queja, imagina a los miles de trabajadoras(es) que dieron lo mejor de sí al proporcionarte alimentos, servicios de hospedaje, transportación, salud, seguridad, limpieza, guía turística, etc. para ellos vacaciones es sinónimo de trabajo intenso y de oportunidades para incrementar sus ingresos; decirles gracias, saludarlos o regalarles una sonrisa, les puede hacer el día.
México es un país de contrastes y en el 2022, el 72% de las y los mexicanos no salió de vacaciones por falta de recursos; en 2023 este porcentaje se incrementó y alcanzó un 76%; incluso hoy, el 70% de los mexicanos nunca ha viajado en avión.
Si en el 2024 estuvieras en este supuesto, habría que considerar que para vacacionar no siempre se ocupa salir de Colima y que nuestro estado ofrece alternativas para todos los bolsillos; se puede disfrutar visitando u hospedándose en destinos de playa o montaña; también se pueden hacer actividades ecoturísticas o de aventura en un día.
Aun cuando las finanzas familiares sean cortas, es posible participar en actividades religiosas, culturales o deportivas; probablemente recuerdes tardes enteras de juegos, lectura, cursos o momentos de convivencia familiar que se atesoran. No se debe olvidar que este también es un espacio de reflexión religiosa, que nos invita a ser mejores personas.
Imagina además que en estas vacaciones, cuidamos el medio ambiente; evitamos contaminar y que con el ejemplo le apostamos a formar una cultura de sostenibilidad y sustentabilidad para las próximas generaciones.
A nivel nacional, los beneficios del turismo son una realidad. La Secretaría de Turismo (SECTUR) destaca que las vacaciones de semana santa generarán una derrama económica de 274,998 millones de pesos y prevé una ocupación hotelera de 62.5%, mayor en 1.8% a la registrada en 2023.
Asimismo, la Sectur afirma que los destinos de playa que tendrán mayor ocupación hotelera son: Puerto Vallarta (83%); Los Cabos, Baja California Sur (82.8%); Cancún, Quintana Roo (82.3%) y Bahías de Huatulco, Oaxaca, con 82.1%. Entre los destinos coloniales destacarían Puebla (66.4%); Querétaro (60.8%) y San Miguel de Allende, Guanajuato con el 50%.
Imaginar las vacaciones ideales nos sensibiliza al identificar oportunidades de mejora; el reto es tener la inteligencia para hacerlas realidad y actuar en consecuencia.