Todos y cada uno de los diez jugadores de campo del once del pasado miércoles en las Semifinales de la Liga de Campeones contra el París Saint Germain, presumibles titulares también en la vuelta del próximo martes, descansaron de inicio este sábado en el Borussia Dortmund, que goleó a toda velocidad al Augsburgo liderado por Marco Reus para afianzar la quinta plaza y acercarse al pase a la Champions.
Una victoria fulminante, sentenciada con el 4-1 sobrepasada la media hora, con un gol y una asistencia de Reus (luego añadió otra en el 5-1 de Nmecha), mientras Ryerson, Hummels, Schlotterbeck, Maatsen, Jadon Sancho, Sabitzer, Brandt, Emre Can, Adeyemi y Füllkrug asistían en el banquillo a un triunfo incontestable de sus compañeros, entre las rotaciones masivas de Edin Terzic. El único que repitió fue el portero Gregor Kobel.
En la agitación de su 11, por descanso para la ida y para la vuelta de la Champions, debutó Kjell Watjen en el medio campo, a sus 18 años, y jugó su segundo duelo del curso actual Mateu Morey. La última presencia del defensa español en el 11 inicial del primer equipo del Borussia Dortmund databa de abril de 2021. Dos equipos diferentes para 2 triunfos.
Porque la victoria del Dortmund contra el Augsburgo fue incontestable. Desde el primer minuto hasta el último. Nunca hubo duda. Desde la primera ocasión, cuando Moukoko anotó el 1-0 casi bajo la línea tras el regalo de la defensa contraria (m. 4), hasta el pitido final, aunque todo se resolvió mucho antes, con una superioridad evidente de los locales.
En el campo, pese a los cambios, pese al descanso de varias de sus grandes referencias, había jugadores de un potencial incuestionable. No sólo Moukoko, sino también Malen, su mejor goleador de la temporada, dañado por las lesiones en el último mes. Suyo fue el 2-0 en el minuto 20, cuando remató un centro perfecto de Byone-Gittens, rápido, ágil, desbordante y otro de los jóvenes que apuntan altísimo a sus 19 años. Su quinta asistencia.
También fue titular Marco Reus, que ya ha anunciado su marcha del Signal Iduna Park al final de la temporada. Este sábado disputó su partido número 425 con el Dortmund, con 169 goles y 104 asistencias, después de este sábado. Suyo fue el córner que remachó sin querer Moukoko en el 3-0 (m. 30) y suyo fue el 4-0 del minuto 35, cuando aprovechó el pase de Felix Nmecha y la autopista que le brindó su rival para picar el balón ante Koubek.
Entre medias, Vargas había anotado el 3-1. Una anécdota entre el encuentro que dominaba el Dortmund, que aún incluso pudo ir más allá en el marcador antes del descanso. El segundo tiempo, un trámite, dejó una magnífica parada de Kobel, un ritmo mucho más bajo, y un nuevo pase de gol de Reus para el 5-1 de Nmecha, ya superada la hora de juego.
La ovación fue atronadora cuando Reus abandonó el campo, reemplazado por Julian Brandt. Se giró hacia todo el estadio, aplaudió el apoyo de su afición, recibió el abrazo de Terzic, agradeció la felicitación de sus compañeros y se sentó en el banquillo con una precisión del 95% del pase, un gol y 2 asistencias. El próximo curso lo aguarda otro destino.