Por Amador Contreras Torres
(Segunda de 2 partes)
LO RELEVANTE. Ante las amenazas de Donald Trump en el sentido de la anexión de México a EUA, creo que los asesores de la presidenta Sheinbaum deben poner sobre la mesa la necesidad de conversaciones con la oposición para hacer un llamado a la unidad nacional, ante la magnitud de las amenazas. Ante el grave riesgo que se cierne sobre el horizonte, no debemos permitir que “el país se nos deshaga entre las manos”, como bien decía el ex presidente Miguel de la Madrid. Los peligros son reales y son latentes. La integridad territorial de México está en riesgo. En este orden de ideas, no se debe olvidar que fuertes liderazgos políticos y empresariales de Nuevo León y de Jalisco se han planteado, de forma seria, la posibilidad, de salirse del pacto federal y de ser repúblicas independientes. La unidad nacional y una sólida cohesión con los liderazgos sociales, empresariales y políticos, es lo que nos debe convocar como nación y es lo único que puede preservar nuestro proyecto de futuro como nación soberana e independiente. EL PELIGRO. Los riesgos ahí están como en su momento, lo advirtió de forma visionaria el ex rector de la UNAM, Pablo González Casanova:” México se debate entre la consolidación de su proyecto nacional soberano e independiente y entre el riesgo de la anexión a los Estados Unidos”. Ese peligro que fue advertido hace 30 años por don Pablo González Casanova, un gran ex rector de la UNAM y un destacado intelectual mexicano que reflexionó mucho en su obra sobre los grandes problemas nacionales y la democracia en México. En los tiempos en González Casanova alertaba sobre el riesgo de la anexión territorial a los Estados Unidos, nadie más lo había dicho ni en México ni en EUA. Que ahora mismo lo esté diciendo el próximo presidente de EUA, es de la mayor importancia, y es para tomarlo muy en serio, y construir la unidad nacional como un fuerte valladar para hacer frente a las agresiones externas y las asechanzas que se ciernen sobre México y que van a arreciar una vez que asuma el poder Donald Trump el próximo 20 de enero de 2025. SUCESIÓN. Hace algunas semanas yo escribí aquí en este espacio que la sucesión gubernamental ya empezó en Colima y velan armas los actores políticos que aspiran a suceder en la gubernatura a la maestra Indira Vizcaíno en el 2027. Yo escribí que desde mi punto de vista los perfiles más fuertes y sobresalientes para la gubernatura eran Rosi Bayardo y Riult Rivera, pues el hecho de ser los alcaldes de los 2 municipios más grandes e importantes del estado les confería una gran visibilidad y los ponía en el arrancadero de la sucesión gubernamental. PERFILES. Sin embargo, algunos de mis lectores me han cuestionado, en persona y por teléfono, y me dicen que esta lista es incompleta y debería de incluir a otros perfiles como el senador Virgilio Mendoza, la alcaldesa Tey Gutiérrez, el Rector Christian Torres o el diputado Leoncio Morán. Lo consigno aquí para los que me dicen que la lista que yo presenté es incompleta y no se reduce solo a los ediles Riult Rivera y Rosi Bayardo. Lo cierto es que más allá de las aspiraciones personales, que son legítimas, para servir a Colima, lo más importante es el trabajo que hagan, el peso político que tengan cada uno de los actores, y la marca de su partido; así como su capacidad de respuesta a las demandas populares. Todavía falta tiempo, por lo que la lista de aspirantes puede ampliarse o cerrarse. No lo sabemos todavía. En el caso de Virgilio, se ha portado de forma muy moderada y no ha hecho declaraciones estridentes, se maneja con un perfil discreto y bajo. Tey Gutiérrez está agarrando fuerza política por su trabajo cercano a la gente. El Rector no ha dicho nada al respecto, pero su buen trabajo en la Casa de Estudios, hace que los ciudadanos y los expertos en política empiecen a hablar de él. En cuanto a Leoncio Morán, se ha mostrado discreto y mesurado y no ha dicho una sola palabra sobre el tema de la sucesión gubernamental. RECTIFICACIÓN. La obra de la Calzada Galván de acortar a 2 carriles y desaparecer las banquetas fue una mala idea, una mala decisión del ex gobernador Peralta, pues lo que antes era la majestuosa Calzada Galván quedó convertida en un simple callejón y en un cuello de botella causante de muchos accidentes. Creo que ha llegado la hora de derribar esos bolardos que son un estorbo, volver a hacer las banquetas y retomar a que la Calzada sea de 4 carriles y no de 2 como lo es ahora. Creo que el edil Riult Rivera puede hacer esta obra de rectificación que es más que urgente. Colima es ya una urbe, una gran ciudad y no un rancho.
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