En el marco de la XXVIII de la Feria del Libro Universitario Altexto 2025, la Universidad de Colima (UdeC) entregó el nombramiento de Maestra Universitaria Distinguida a la doctora Lucina Jiménez López, un reconocimiento que trasciende a la persona para enaltecer el valor de la cultura como motor del desarrollo social.
La trayectoria de Jiménez López, marcada por más de 40 años de dedicación a la promoción cultural, gestión y formación, es un ejemplo luminoso de cómo el arte y las letras pueden transformar vidas y comunidades.
Ese nombramiento, encabezado por el Rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, destaca no solo el papel de la homenajeada como promotora cultural, sino también su capacidad para articular voluntades entre artistas, instituciones y la sociedad.
Su liderazgo al frente del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) fue fundamental para que la UdeC pueda entregar año con año el Premio Bellas Artes de Narrativa Colima para Obra Publicada, un logro que subraya la importancia de tejer redes entre la academia y las instancias culturales.
El reconocimiento cobra un significado especial al realizarse en la Pinacoteca Universitaria, un espacio que celebra el arte y la memoria, y en el contexto de Altexto, una jornada que nos recuerda que los libros son, como bien lo expresó Lucina Jiménez, agentes de transformación de vidas. Ese homenaje no solo enaltece a la doctora Jiménez, sino que refuerza el compromiso de la Universidad de Colima con el fomento de la cultura y el arte como herramientas para la construcción de una sociedad más justa y consciente.
Es especialmente significativo que ese nombramiento se lleve a cabo en mayo, el mes de las y los maestros, y en el contexto de un estado como Colima, que ha sabido valorar el papel de figuras como Lucina Jiménez en la construcción de su identidad cultural. Desde su participación en el desarrollo de la Biblioteca Central “Rafaela Suárez” durante el Gobierno de Griselda Álvarez, hasta su labor como antropóloga y promotora cultural, la homenajeada ha dejado una huella profunda en la región.
Celebramos, entonces, no solo a la doctora Jiménez López, sino también a todas las personas que, como ella, dedican su vida a la cultura y la educación. Su historia nos recuerda que el arte y el conocimiento no solo son refugios, sino también puentes hacia un futuro más humano.

