Por *Mtra. Ruth Holtz
“Actualmente, ante la proliferación de técnicas y teorías científicas, la confusión se cierne respecto a cuáles son las explicaciones que dan cabal cuenta de los hechos de la realidad. Todos los puntos de vista parecen aportar algo valioso, aunque parciales, manifiestan aspectos de lo real que no quisiéramos ignorar del todo. Frente a la complejidad de lo real, una conciliación de múltiples ópticas parcialmente funcionales, de las cuales ignoramos si son verdaderas, pero que con frecuencia nos parecen probables, existe la tentación, sino es que ya la franca intención, de lograr una síntesis o de integrar un cuerpo doctrinario que abarque lo mejor de todas aquellas visiones incompletas, en apariencia, configurándonos un todo una vez unidas. Otra alternativa que nos parece atractiva es que dependiendo del hecho que enfrentemos y del que tengamos que dar cuenta, ya sea para dar una explicación, para generar hipótesis que permita instrumentarlo o para diseñar técnicas para enfrentarse con él, “seleccionemos” de entre todas las teorías y técnicas existentes, la más idónea para el caso”. Ruth Holtz.1994. “Las revelaciones del eclecticismo”. Revista Ciencia Ergo Sum. Vol. 4 (número 3). p. 351.
La crisis de las ciencias humanas abre el panorama poco confiable en el área de la salud y el crecimiento emocional. A partir de ese artículo dejo ver que lo más importante es la capacidad del profesional de unir en un criterio las distintas posturas, pero con una actitud estricta de buscar la verdad con la mayor objetividad posible, haciendo a un lado intereses como los que proliferan hoy de “comercio del saber”.
En mi experiencia como psicoterapeuta, he conocido distintos enfoques clínicos para, aquí está la clave, poder afinar mi capacidad para dilucidar los conflictos que causan el malestar, el sufrimiento y el estancamiento en una persona única e imposible de acceder con conocimientos generales.
Ser una psicoterapeuta ecléctica, pero con experiencia para utilizar los distintos enfoques dependiendo de las necesidades, los padecimientos y el sufrimiento de la persona concreta que tiene uno enfrente. Por ejemplo, una persona que habla mucho sobre qué le pasa, que tiene todo demasiado analizado y que se expresa con calma, a pesar de contar asuntos muy dolorosos o que generan mucha rabia, nos habla de alguien que necesita conectar con sus emociones, expresar lo que siente sin intelectualizarlo ni invalidarlo con argumentos. Y una vez recobrada la conexión sensible y la apertura a pedir ayuda, contacto y consuelo, pasar a desarmar, analizar y comprender para tomar decisiones. Pero si la persona, por lo contrario, viene a llorar, a enojarse, se percibe como la víctima de situaciones que ocurren en su seno familiar o en sus relaciones más íntimas, quizá requiere reconocer la parte que pone, comprender y analizar su comportamiento y lo que está buscando al aceptar ser cómplice.
Todos esos abordajes están anclados en teorías psicoanalíticas, en conceptos de expresión emocional de enfoque reichiano y en concepciones de la terapia gestalt. Por lo tanto, la atención adecuada obliga a que uno tenga en mente varios aspectos de la personalidad y los maneje guiándose por varios criterios, entre ellos su propia emotividad que pone como un medidor de dolor y angustia para poder atender a una persona que en ocasiones incluso puede tratar de engañarse ella y al psicoterapeuta.
Para destacarse, como profesional de la salud mental, que lo más importante es la experiencia para manejar los diferentes puntos de vista de los distintos enfoques psicoterapéuticos. Las teorías no deben usarse para clasificar a la gente o decidir que son de esta o esta manera porque se les ve sólo con los ojos de esa teoría. Las teorías desarrollan una mentalidad en el profesional que luego le sirve, junto con sus emociones entrenadas, para poder acoger a la persona y brindarle las experiencias y la comprensión que requiere para verse a sí misma. Para ser ecléctico hay que saber qué hacer con todos los enfoques que uno aprende. Guiarse por principios científicos es la clave.
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