Los deportistas que participen en los Juegos Olímpicos de París 2024 podrán expresar libremente sus opiniones sobre cualquier asunto en todos los escenarios salvo en 4: las ceremonias de inauguración y clausura, las entregas de medallas, durante la competencia y durante su estancia en la Villa Olímpica.
Las zonas mixtas en las que atienden a los medios de comunicación, los centros de prensa, las conferencias, las entrevistas, las reuniones de equipo, los medios tradicionales o digitales, las redes sociales y los momentos previos a la competencia (cámara de llamadas, presentación de los deportistas…) serán el lugar adecuado para que los atletas defiendan sus puntos de vista, pero aun así bajo ciertas condiciones.
Entre ellas, que respeten los principios fundamentales del olimpismo, que no ataquen a personas, organismos o países, que no contravengan lo que disponga su comité olímpico o federación o que no sean “disruptivos”, según las normas hechas públicas hoy por el COI.
Por actitudes disruptivas el COI entiende, por ejemplo, “expresiones durante la presentación o el himno” de otros deportistas o desplegar una bandera o un cartel en ese momento.
No respetar estas reglas puede dar origen a medidas disciplinarias, que serán proporcionales a la infracción.
En los Juegos de Tokio se abrió la puerta a la expresión de opiniones en escenarios olímpicos, antes totalmente prohibidas. Las jugadoras de las selecciones femeninas de futbol de Gran Bretaña, Chile, Estados Unidos, Suecia y Nueva Zelanda hincaron la rodilla en el césped antes de comenzar algunos partidos como señal de protesta contra el racismo.