La temporada navideña: un escenario estratégico para el fortalecimiento de marca y relaciones sostenibles
Por Alma Ruth Rebolledo Mendoza*
La temporada navideña constituye un momento crítico en el panorama comercial global, transcendencia como un periodo de alta relevancia estratégica para las organizaciones para fortalecer las relaciones con los consumidores, se posicionen y crean una conexión emocional que perdure más allá de la temporada ya que permite consolidar el posicionamiento de su marca y crear conexiones emocionales que perduren más allá del calendario festivo.
El grado en que las empresas puedan aprovechar esta oportunidad se basa en tres fundamentos: planificación con previsión, profundo conocimiento del mercado y ejecución creativa.
La Planeación es uno de los pilares fundamentales para la implementación de una estrategia exitosa en un entorno donde la sociedad se encuentra satura de ofertas y mensajes comerciales, la anticipación permite a las empresas de adaptarse a las tendencias emergentes, pero influir en ellas. Identificar y responder a la creciente expectativa de sostenibilidad, por ejemplo, posiciona a las marcas como referentes éticos, incrementando la confianza de las personas consumidoras y diferenciándolas de sus competidores. Este enfoque solo asegura una mayor relevancia de las campañas, sino que contribuye a establecer un posicionamiento sólido a largo plazo.
El conocimiento del mercado es importante. La investigación científica en marketing ha demostrado que las campañas que incorporan elementos personalizados son efectivas para captar la atención y generar lealtad. No solo es segmentar a los consumidores por criterios demográficos; es necesario explorar sus motivaciones, valores y comportamientos.
Las marcas que logran expresar mensajes adecuados a las expectativas únicas de sus audiencias se convierten en las preferidas y, por eso, construyen una relación de valor que va a la venta.
La narrativa emocional es un elemento esencial en las estrategias navideñas. Si se ejecuta, los consumidores tienden a sentirse atraídos por las marcas que logran evocar emociones positivas como la nostalgia, la solidaridad y la generosidad. Una historia auténtica que refleje estos valores tiende a conectar de manera profunda con el público. Esto permite que tal conexión no solo fortalezca la percepción de autenticidad de la marca, sino que inspire confianza, un elemento importante de todas las relaciones poderosas y un importante impulsor de la lealtad a largo plazo.
El diseño visual desempeña un papel complementario pero esencial en la efectividad de las campañas navideñas. Elementos como los colores tradicionales, las tipografías festivas y las imágenes relacionadas con las celebraciones contribuyen a crear un entorno visual que refuerza el mensaje central de la campaña. Sin embargo, la consistencia en la identidad visual de la marca es crucial para evitar confusiones o contradicciones que puedan diluir el impacto estratégico del mensaje.
En términos tácticos, las promociones desempeñan un papel preponderante. Los incentivos exclusivos, cuando están diseñados, tienen el potencial de estimular decisiones de compra inmediata. Sin embargo, es importante que estas estrategias comprometan la percepción de valor de la marca. Una promoción efectiva no solo debe generar resultados financieros, sino reforzar la relación entre la marca y las personas consumidoras, cimentando una imagen coherente y confiable.
El entorno digital amplifica las oportunidades para las estrategias navideñas. Las redes sociales, por ejemplo, se han convertido en un canal fundamental para la interacción directa con las audiencias y la ampliación del alcance de las campañas. Tácticas como publicaciones interactivas, colaboraciones con figuras influyentes y transmisiones en vivo han demostrado ser efectivas para fomentar el compromiso y la participación. El email sigue siendo una herramienta poderosa para entregar contenido personalizado que nutra la relación con las personas consumidoras y promueva la fidelidad.
Una de las tendencias significativas que impacta el marketing navideño en la actualidad es la sostenibilidad. Las personas consumidoras no solo esperan, sino que exigen que las marcas adopten prácticas responsables que reflejen valores compartidos. Desde la implementación de materiales reciclables hasta el apoyo a causas sociales, estas acciones no solo refuerzan la credibilidad de las marcas, sino que contribuyen a construir un legado positivo en términos de impacto social y ambiental.
La integración omnicanal se presenta como otro aspecto crítico. La consistencia en los puntos de contacto, física como digitales, es esencial para garantizar una experiencia fluida y satisfactoria. Por ejemplo, la posibilidad de realizar pedidos en línea y recogerlos en tienda no solo combina conveniencia con personalización, sino que mejora la percepción de accesibilidad de la marca. Esta capacidad de integrar múltiples canales refuerza la experiencia del consumidor y fomenta la lealtad a largo plazo.
En última instancia, la temporada navideña proporciona plataformas estratégicas únicas para que las organizaciones fomenten su relación con los consumidores, consoliden su posicionamiento y promuevan una conexión emocional sostenible. Las marcas que han perfeccionado el arte de combinar creatividad, empatía y sostenibilidad tendrán la oportunidad de destacar durante el periodo festivo y establecer una base sólida para su relevancia futura. Está combinación de elementos estratégicos no solo contribuye al éxito inmediato, sino que refuerza el legado y la responsabilidad de las organizaciones en el mercado contemporáneo.
Esta columna es desarrollada por integrantes del UCOL-CA59 La mercadotecnia y su relación con las ciencias sociales, adscrito a la Facultad de Mercadotecnia de la Universidad de Colima.
*PTC de la Facultad de Mercadotecnia e integrante del UCOL-CA59.
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