“Publish or perish”, el arte de publicar en revistas indexadas
Por Sara Aliria Jiménez García*
En los últimos años los investigadores de las universidades mexicanas y de alrededor del mundo tienen el reto de publicar en revistas indexadas, con alto factor de impacto, preferentemente en inglés y en coautorías internacionales. Esta tarea es uno de los modos regulares de difundir la ciencia lo que privilegia algunas prácticas académicas, económicas y políticas y conlleva efectos no esperados para el desarrollo del conocimiento científico y de las sociedades que se nutren de él.
Publicar un texto no sólo implica saber investigar, escribir, reconocer dónde publicar y cómo atender las recomendaciones de los revisores del documento, pues las revistas con altos factores de impacto suelen estar asociadas a editoriales comerciales que tienen altos precios de procesamiento de textos y de consulta, lo que implica que la ciencia más avanzada y refinada tiene costos que dejan fuera de las revistas a quienes no pueden pagar sus cuotas.
Al mismo tiempo, vale preguntarse, ¿quiénes deben asumir los costos por publicar y consultar textos?, ¿los gobiernos nacionales, las universidades o los investigadores?, ¿vale la pena que los campos científicos se transformen en élites más cerradas, discriminatorias y caras?, ¿es necesario que diversos grupos sociales no tengan acceso libre y gratuito al conocimiento?
Cabría cuestionarse si, al igual que la educación y la salud, la ciencia es ahora el objetivo de empresas que buscan nuevos y redituables espacios de negocios, dado el alto interés actual de los gobiernos, las universidades y los investigadores por publicar en las revistas indexadas de alto impacto. Dicho fenómeno de cobrar por publicar y consultar artículos sucede a pesar de que los textos que se publican son escritos y revisados por los investigadores de manera gratuita.
Publicar en este tipo de revistas indexadas también ponen en entredicho la rigurosidad, novedad y originalidad de los textos, autores y medios de difusión que no se alinean con sus pautas. Por ejemplo, publicar en revistas no indexadas, en libros, ponencias, textos en español, sin coautorías internacionales o en revistas indexadas que no son de alto factor de impacto pondría en duda la capacidad académica de los textos y la validez de lo que sus autores plantean, porque estarían fuera de los dispositivos más cotizados y que se catalogan como ciencia de frontera o avanzada.
Por supuesto, al referir los medios para la publicación no se discute de manera precisa el valor de los contenidos de los textos, pese que a los autores y textos publicados en revistas indexadas con alto factor de impacto se les adjudican altos grados de confiabilidad y de refinamiento científico.
Sin embargo, los artículos de las revistas depredadoras ponen en duda la validez de estos presupuestos por varias razones, operan de maneras parecidas a las indexadas, sus organizadores también obtienen ganancias, los textos borran su origen cuando están disponibles para consulta en algunas bases de datos y sus contenidos son partes fundacionales de las culturas y tradiciones científicas actuales, al igual que los producidos en las indexadas.
Los textos de las revistas depredadoras e indexadas se mezclan a tal grado que para los lectores es difícil diferenciarlos. Además, las revistas depredadoras complejizan las decisiones de los autores al elegir revistas para publicar, pues crean confusiones entre principiantes y expertos para diferenciar los textos y medios que cubren las cualidades de indexación, de los que sólo imitan tales características y se unen a las bases de datos como consultables.
A la vez, un tema que no es menor cuando de publicar en revistas indexadas se trata, es que todavía no existen dispositivos suficientemente potentes para diferenciar el conocimiento que tendrá un gran impacto en la ciencia, de aquel que sólo engrosará las amplias cifras de textos que se encuentran en las bases de datos académicas. Distinguir un buen artículo y predecir su impacto puede llevar años y hasta décadas, tal como refieren los autores que clasifican los textos como sleeping beauties, smart girl y flashes in the pan.
En suma, publicar en revistas indexadas construye una amplia agenda que puede ser revisada con más detenimiento, dado que fundamenta las tradiciones académicas y del oficio en las universidades, pero no resuelve el hecho de que se produzcan más textos y no más avances científicos; y deja ver que estas decisiones representan amplios intereses políticos, económicos y privados que no necesariamente fortalecen la ciencia.
Para conocer más del tema puede cosultar el siguiente enlace: https://doi.org/10.21696/rcsl132420231488.
*Profesora investigadora de la Facultad de Pedagogía de la Universidad de Colima
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